Este lunes se informó que un iceberg de 1.500 kilómetros cuadrados, equivalente a 15 veces la superficie de París, se desprendió de la Antártida el pasado domingo.
Aunque la región se encuentra amenazada por el calentamiento global, el desprendimiento no se debe al cambio climático, señaló el British Antarctic Survey (BAS), un organismo que investiga las regiones polares.
El bloque de hielo, de 1.550 km2, se desprendió de la banquisa después de que una fuerte marea ensanchara una grieta que ya existía en la plataforma de hielo, detalló el BAS.
«Este desprendimiento era esperado y es parte del comportamiento natural de la plataforma de hielo Brunt. No está vinculado al cambio climático», explicó el glaciólogo Dominic Hodgson, citado en un comunicado.
Fuente: Meganoticias