Una de las jóvenes que integraron el selecto grupo del documental «Amén: Francisco responde«, fue una migrante ecuatoriana que vive en Sevilla, España, desde que tiene 3 años de edad.
En el documenta, el papa Francisco se reúne con un grupo de jóvenes de varios países del mundo para debatir sobre diversos temas, desde los más genuinos hasta los más polémicos.
La migrante ecuatoriana en la actualidad tiene 22 años y estudia caracterización y maquillaje profesional.
La joven se sinceró con el pontífice diciéndole que fue víctima de racismo por mucho tiempo. “Me tocó pasar todo ese tiempo de acoso escolar, racismo, y todo lo demás”, reveló la ecuatoriana que se conmovió enseguida por este recuerdo de su niñez que “aún le toca mucho”.
Ella expresó que en estos momentos de su vida se encuentra en la búsqueda de su felicidad, por lo que quiere borrar todo su pasado. Para esto dijo que ha tenido la ayuda de una terapeuta y de la iglesia evangélica.
La pregunta que le hizo al papa fue la siguiente: “¿Usted es feliz, alguna vez se ha sentido solo?”.
El Papa Francisco admitió que se ha sentido solo, “pues todos en algún momento nos hemos sentido solos alguna vez”. “En momentos de soledad te vienen las propuestas más descabelladas para salir de la soledad… La soledad es como el invierno de una vida. Un criterio en tiempo así, en tiempo nublado, no hay que cambiar de rumbo… espera a que pase el nublado, que pase el invierno y ahí plantéate si es que hay que cambiar o no”, le aconsejó el papa, quien agregó que el diálogo es importante en momentos como ese.
Y continuó: “Mi experiencia de vida es que todo momento, incluso el más feo que pasé en mi vida, a la larga sirvieron para bien. Yo pasé momentos feo en la vida y sin embargo cuando la vida te da la oportunidad y Dios te da la gracia de asumirlos, esos momentos feo dan buen fruto”, dijo.
En el documental disponible en Star + participan un total de diez jóvenes, entre católicos, musulmanes y ateos, de entre 20 y 25 años. El máximo exponente de la Iglesia católica conversó sobre temas controversiales como el abuso sexual de niños por parte de funcionarios de la Iglesia, la situación migratoria en Europa, el aborto, y la inclusión de la comunidad LGBTQ+ en la organización.