La agencia espacial de Estados Unidos (NASA) alertó este jueves que la ola de calor que se está registrando en distintos países del mundo “no es ninguna sorpresa” y que va a continuar a menos que cese el envío de gases con efecto invernadero a la atmósfera.
«Durante las últimas cuatro décadas ha habido un aumento de las temperaturas cada década. Este pasado junio fue el junio más cálido del que hay registros y anticipamos que julio será probablemente el julio más caluroso”, indicó en una conferencia de prensa el director del Instituto Goddard de Estudios Espaciales de la NASA, Gavin Schmidt.
Según el experto, controlar la situación está en nuestras manos: “Pensamos que va a continuar porque seguimos lanzando gases con efecto invernadero a la atmósfera y hasta que no dejemos de hacerlo las temperaturas seguirán aumentando”.
El fenómeno meteorológico de El Niño, en su opinión, no justifica por sí solo la actual ola.
“Estamos viendo un calor generalizado prácticamente en todas partes, sobre todo en los océanos, donde durante meses hemos visto temperaturas récord en la superficie marina, incluso fuera de los trópicos, y anticipamos que continuará”, dijo Schmidt.
El director del Instituto Goddard avanzó que la tendencia actual aumenta las posibilidades de que en los próximos años se sigan batiendo récords. “Mis cálculos apuntan que hay un 50 % de posibilidades de que 2023 sea el año más caluroso hasta la fecha. Otros sugieren que hay más bien una probabilidad del 80 %. Y creemos que 2024 será incluso más cálido”.
El jefe del Laboratorio de Ecología Oceánica del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, Carlos Del Castillo, añadió que las olas de calor se extienden también a los océanos.
“Y los problemas con las temperaturas de los océanos no se quedan en el océano: afectan a todas partes. Los aumentos en las temperaturas de los océanos provocan más fenómenos meteorológicos extremos y lluvias torrenciales en las zonas costeras”, agregó.