Un grupo de hinchas violentos del Marsella atacó al bus de Olympique de Lyon con proyectiles, lo que ocasionó una herida fuerte al entrenador Fabio Grosso, y su ayudante Raffaele Longo.
El ganador del Mundial 2006, ahora entrenador del Lyon, recibió 13 puntos de sutura muy cerca de su ojo izquierdo. El director técnico fue herido tras el ataque de piedras y botellas que partieron varios cristales del vehículo.
Por esta agresión, Grosso recibió una ITT [incapacidad total de trabajo] de 30 días y los actos son susceptibles de ser castigados hasta con diez años de prisión, precisó el fiscal de la República Francesa en Marsella, Nicolas Bessone, en una intervención ante la prensa.
Foto de @lequipe de Fabio Grosso.
Únicamente unos animales, unas personas sin valores cívicos, sin cabida en esta sociedad, pueden hacer esto con la excusa de la rivalidad del fútbol. El partido no puede disputarse. Es una jodida vergüenza que le pase esto a un entrenador. pic.twitter.com/Dbjs3BSKA9
— Andrés Onrubia Ramos (@AndiOnrubia) October 29, 2023
«El domingo podría haber terminado en tragedia»
En imágenes ofrecidas por Prime Video, difusor de la Ligue 1 en Francia, se pudo ver a Grosso con la cara ensangrentada y después saliendo de la enfermería del Vélodrome con un vendaje en la cabeza.
«Lo ocurrido el domingo por la noche podría haber sido una tragedia, y ciertamente lo fue para el deporte y para todos aquellos que lo aman», declaró Fabio Grosso después del atentado en sus redes sociales.
Luego agregó: «Deseo de todo corazón que esto pueda ser una lección para nuestro futuro».
Vicent Ponsot, director general del Olympique de Lyon, declaró lo riesgoso que pudo haber sido.
«Hay seguimiento porque la extensión del corte es importante y corría el riesgo de perder el ojo izquierdo. Debido a que se llevó una botella de vidrio llena a la cabeza a gran velocidad, había riesgo de conmoción cerebral, entonces sí, hay una secuela de eso».