Los ojos son más que una ventana al alma, también son un reflejo de la salud cognitiva de una persona.
“El ojo es la ventana al cerebro”, dijo la oftalmóloga Christine Greer, directora de educación médica del Instituto de Enfermedades Neurodegenerativas en Boca Raton, Florida. «Puedes ver directamente el sistema nervioso al mirar en la parte posterior del ojo, hacia el nervio óptico y la retina».
La investigación exploró cómo el ojo puede ayudar a diagnosticar la enfermedad de Alzheimer antes de que comiencen los síntomas. La enfermedad se encuentra en una etapa muy avanzada cuando comienza a afectar la memoria y el comportamiento.
Si los médicos pueden identificar la enfermedad en sus etapas más tempranas, las personas podrían optar por un estilo de vida saludable y controlar sus «factores de riesgo modificables, como la presión arterial alta, el colesterol alto y diabetes», dijo Isaacson.
¿Qué tan temprano podemos ver signos de deterioro cognitivo? Para averiguarlo, un estudio reciente examinó tejido donado de la retina y el cerebro de 86 personas con diferentes grados de deterioro mental.
«Nuestro estudio es el primero en proporcionar análisis en profundidad de los perfiles de proteínas y los efectos moleculares, celulares y estructurales de la enfermedad de Alzheimer en la retina humana y cómo se corresponden con los cambios en el cerebro y la función cognitiva», dijo la autora principal Maya Koronyo-Hamaoui, profesora de Neurocirugía y Ciencias Biomédicas en Cedars-Sinai en Los Ángeles, en un comunicado.
“Estos cambios en la retina se correlacionaron con cambios en partes del cerebro llamadas cortezas entorrinal y temporal, un centro para la memoria, la navegación y la percepción del tiempo”, dijo Koronyo-Hamaoui.
Los investigadores del estudio recolectaron muestras de retina y tejido cerebral durante 14 años de 86 donantes humanos con enfermedad de Alzheimer y deterioro cognitivo leve, el grupo más grande de muestras de retina jamás estudiado, según los autores.
Luego, los investigadores compararon muestras de donantes con función cognitiva normal con aquellos con deterioro cognitivo leve y aquellos con enfermedad de Alzheimer en etapa avanzada.
El estudio, publicado en febrero en la revista Acta Neuropathologica, encontró aumentos significativos en la beta-amiloide, un marcador clave de la enfermedad de Alzheimer, en personas con alzhéimer y deterioro cognitivo temprano.
Las células microgliales se redujeron en un 80% en las personas con problemas cognitivos, descubrió el estudio. Estas células son responsables de reparar y mantener otras células, incluida la eliminación de beta-amiloide del cerebro y la retina.
«(También) se encontraron marcadores de inflamación, que pueden ser un marcador igualmente importante para la progresión de la enfermedad», dijo Isaacson, quien no participó en el estudio.
«Los hallazgos también fueron evidentes en personas con síntomas cognitivos mínimos o nulos, lo que sugiere que estas nuevas pruebas oculares pueden estar bien posicionadas para ayudar en el diagnóstico temprano».
Los investigadores del estudio encontraron un mayor número de células inmunitarias que rodeaban estrechamente las placas de beta amiloide, así como otras células responsables de la inflamación y la muerte de células y tejidos.
La atrofia del tejido y la inflamación en las células en la periferia lejana de la retina fueron los más predictivos del estado cognitivo, encontró el estudio.
«Estos hallazgos pueden eventualmente conducir al desarrollo de técnicas de imagenología que nos permitan diagnosticar la enfermedad de Alzheimer antes y con mayor precisión», dijo Isaacson, «y monitorear su progresión de manera no invasiva mirando a través del ojo».