Daniel y Ana Parra son dos hermanos españoles que mantienen una relación amorosa hace nueve años y luchan para poder casarse.
Ana siempre supo que tenía un padre, pero no lo conocía y gracias a Facebook pudo contactarse con él. De esa forma llegó a Daniel Parra, su hermano, que en ese momento tenía 17 años.
La química fue instantánea. «Nos dimos un abrazo y nos dio por reírnos. Fue una situación muy rara», contó la joven a El Español.
«Intentamos mantener esa relación de hermanos, que es lo que marcan los cánones, pero nosotros no lo sentíamos así… No existía ese sentimiento fraternal», agregó Daniel a el diario El Español.
Su primer beso ocurrió en una fiesta y la sensación de culpa fue instantánea. «Nos fuimos cada uno por nuestro lado, nos daba cierta vergüenza lo que acababa de suceder», dijo.
Decidieron ocultarlo a sus conocidos por el miedo a ser juzgados «Nosotros no queríamos darnos cuenta, nos enfadábamos con nosotros mismos porque nos costaba admitirlo y romper con ese tabú: somos hermanos, aunque no lo sintiéramos así».
Pasado un tiempo, las personas comenzaron a sospechar y llegó el momento de aceptar públicamente su relación. Incluso acudieron a un programa de televisión para contar más detalles, lo que provocó personas en redes les escribieran que «iban a arder en el infierno».
En España el incesto no está calificado como un delito, pero no es legal casarse. Es por ello que Ana y Daniel, padres de dos hijos, incluso ha evaluado viajar a Suecia para poder unirse.
«Hemos hablado con alguna abogada y nos dicen que no sería tan difícil, pero es mucho tiempo y dinero», cuenta Daniel.
«Las sociedades deben avanzar y no anclarse en tradicionalismos. A los homosexuales tampoco les dejaban casarse y ahora sí pueden. Nosotros nos amamos y eso es lo que debería prevalecer. No hacemos daño a nadie. Por eso queremos que la gente conozca nuestra historia de verdad», reflexionaron.