Vanilla es una chimpancé que estuvo enjaulada toda su vida. La razón por la que este primate no había visto la luz del sol fue debido a que pertenecía a un proyecto de un Laboratorio de Medicina Experimental y Cirugía en Primates de Nueva York, que ya está cerrado, según medios locales.
Vanilla tuvo que esperar 29 años para poder apreciar la majestuosidad del cielo. Después de que el animal fue rescatado, arribó a un refugio de California llamado Wildlife Waystation; allí le cambió la vida.
De acuerdo con defensores del proyecto animal, a los chimpancés como Vanilla se les negó el acceso al aire libre y se les mantuvo en pequeñas jaulas.
Después de vivir sus 28 años de vida en un laboratorio, este chimpancé ve la luz de sol por primera vez. Su reacción no tiene precio pic.twitter.com/NzEh4pwIWq
— ceciarmy (@ceciarmy) June 28, 2023
En efecto, al no haber tenido contacto con el exterior, el primate debió pasar por un proceso de adaptación con el entorno.
Luego de dos años de tratamiento y cuidado oportuno, la chimpancé llegó al santuario Save the Chimps en Florida, donde se convirtió en una amiga más de los 226 primates que habitan este lugar.