Estados Unidos y Canadá se congelan. Al menos 60 personas han muerto en ambos países debido a las bajas temperaturas que han traído fuertes nevadas y vientos huracanados.
El estado de Florida está viviendo su temporada más fría en 33 años, registrando una temperatura de hasta -8 ºC. Eso ha provocado que cientos de iguanas caigan de los árboles en una estado de letargo.
Cientos de personas se han quedado varadas en aeropuertos por vuelos cancelados, mientras que otros se mantienen en sus casas sin electricidad y ni agua potable.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró en emergencia el estado de Nueva York, siendo el más afectado por la tormenta Elliot.
El fenómeno fue calificado como “único en una generación” por el servicio meteorológico nacional, pues ha causado gélidas temperaturas desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta el río Grande, en la frontera con México.