Adolfo Alvarado ensambla las piezas de lo que se convertirá en un monigote del Joker. El gigante se encuentra ubicado en la calle 15 y Capitán Nájera, en el suburbio de Guayaquil.
El joven artesano afirma que este año buscó una temática compleja con un personaje colorido y que llame la atención del público.
El monigote del Joker se encuentra inclinado en un sillón que mide cerca de 8 metros de altura. Su rostro mantiene la risa característica del villano.
Adolfo comenta que este trabajo es imposible de realizarlo solo, por ello cuenta con la ayuda de amigos y familiares.
Entre los turistas encontramos a Luis, quien vive en Nueva York y durante su visita a Guayaquil afirma que es la primera vez que ve monigotes. Aprovechó para grabar a los gigantes y pronto traer a su familia.
Adolfo Alvarado cuantifica una inversión de más de 2.000 dólares debido a la estructura y detalles del monigote.
En una esquina conversamos con Enrique y nos comentó sobre el arte que anualmente realizan los artesanos en el barrio. «Vengan y con billete para que gasten«, dice entre risas.
Adolfo afirma que este arte no se podría realizar cada año sin la visita y apoyo de las personas. Espera tenerlo listo antes del 24 de diciembre y es parte de la ruta de gigantes.