El expresidente Alberto Fujimori gobernó Perú con mano de hierro entre 1990 y 2000, derrotó a la guerrilla maoísta de Sendero Luminoso y estuvo preso por crímenes de lesa humanidad, antes de que el máximo tribunal del país ordenara su liberación «inmediata», a sus 85 años.
Descendiente de japoneses, con una exitosa trayectoria como docente universitario, se convirtió en 1990 en el primer hijo de inmigrantes en conquistar la presidencia de Perú, venciendo en las urnas al archifavorito Mario Vargas Llosa.
Con racionalidad de matemático y contención nipona, aplicó mano dura para desmantelar las guerrillas. Tanto que fue a la cárcel por violar derechos humanos.
Este martes, en un fallo inapelable, el Tribunal Constitucional de Perú restituyó el indulto que le habían otorgado a Fujimori en 2017 por razones humanitarias, y que luego fue revocado por la Corte Suprema en 2019.
El exprsidente padece diversos problemas de salud, como cáncer lingual, fibrilación auricular, dolencia pulmonar e hipertensión.
Cumple desde 2009 una condena por «crímenes contra la humanidad» en el penal Barbadillo, una pequeña cárcel para expresidentes al este de Lima, por la muerte de 25 personas en dos matanzas perpetradas en 1991-1992 por un escuadrón del ejército.
Fuente: AFP