El gobierno mexicano anunció este miércoles un plan de apoyo por 61.313 millones de pesos (unos 3.500 millones de dólares) para los damnificados por el impacto del huracán Otis en Acapulco y zonas aledañas.
«Contamos con presupuesto para financiar todas estas necesidades, estos programas y (…) no consideramos el destinar estos recursos como gasto, sino una inversión», dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su habitual rueda de prensa matutina.
«Juntos lograremos pronto, muy pronto, volver a poner de pie al bello y nostálgico puerto de Acapulco», añadió.
El mandatario dijo que el plan de apoyo implica la entrega de comestibles a las cerca de 250.000 familias damnificadas que hay en el puerto durante tres meses, además de recursos para limpieza, pintura y rehabilitación de los hogares afectados dependiendo del nivel de daños.
Añadió que su gobierno entregará también créditos sin intereses para pequeños negocios y presupuesto para el mejoramiento de servicios urbanos como agua, drenaje y alumbrado.
El plan del gobierno incluye también apoyos para 377 hoteles que contraten créditos en la banca comercial para la reconstrucción, y presupuesto para rehabilitar las vías que conectan Acapulco con Ciudad de México y los municipios aledaños.
El gobierno anunció que también desplegará varios cuarteles de la Guardia Nacional para evitar robos, tras reportes de que decenas de habitantes buscaban evitar delitos con barricadas y machetes.
El huracán Otis, que impactó en la madrugada del pasado miércoles con categoría 5, la máxima de la escala Saffir-Simpson, dejó una estela de destrucción en esa ciudad de 780.000 habitantes, que vive principalmente del turismo.
El desastre natural ha dejado hasta el momento 46 personas fallecidas y 58 desaparecidas, además de cientos de viviendas y hoteles destruidos.
Según la consultora Enki Research, especializada en fenómenos naturales, Otis dejó daños por unos 15.000 millones de dólares.