Google se sentó en el banquillo de acusados este martes en un proceso con el que la justicia de Estados Unidos tratará de dirimir si el dominio aplastante del motor de búsqueda en Internet de la compañía se debe a su rendimiento o bien si detrás de este éxito hay prácticas ilegales.
«Este caso trata sobre el futuro de Internet y sobre si Google alguna vez enfrentará una competencia significativa en las búsquedas», dijo el abogado del Departamento de Justicia Kenneth Dintzer mientras el gobierno de Estados Unidos comenzaba a presentar su caso contra el titán tecnológico.
Según el Departamento de Justicia estadounidense, la compañía tecnológica cimentó su posición dominante en la red con contratos ilegales con empresas como Samsung, Apple y Firefox para que estas instalen su motor de búsqueda de forma predeterminada en sus teléfonos inteligentes y servicios.
Un centenar de testigos van a declarar ante el juez federal Amit Mehta durante las diez semanas de audiencias previstas.
Google is in trial where US Justice Department and several states accuse it of abusing its monopoly power in online search services pic.twitter.com/wl5lypHPV2
— TRT World Now (@TRTWorldNow) September 12, 2023
«Nuestro éxito es merecido», afirmó Kent Walker, director jurídico de Alphabet, la empresa matriz de Google, en un comunicado.
«La gente no utiliza Google porque no tenga otra opción, sino porque quiere. Es fácil cambiar el motor de búsqueda predeterminado, ya no estamos en la era de los módems y los CD-ROM», añadió.
Se trata de la demanda antimonopolio más grande presentada contra un gigante tecnológico desde que el Departamento de Justicia se enfrentó a Microsoft hace más de 20 años por el dominio del sistema operativo Windows.
«Incluso para Washington DC, creo que hoy tenemos la mayor concentración de trajes azules que en cualquier otro lugar», bromeó Mehta, observando a las decenas de abogados reunidos en el tribunal.
La demanda
La demanda se centrará en los contratos que el gigante tecnológico firmó con fabricantes de dispositivos, operadores de telefonía móvil (como T-Mobile o AT&T) y otras compañías, con los que, según el Gobierno, deja pocas posibilidades de competir a sus rivales, como Bing (Microsoft) y DuckDuckGo.
Google, cuyo nombre se volvió incluso un verbo para describir la acción de buscar en Internet, controla el 90% de este mercado en Estados Unidos y en todo el mundo gracias a las búsquedas en teléfonos inteligentes, especialmente en los iPhone (Apple) y aquellos que funcionan con el sistema operativo Android, propiedad de Google