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Michael Oher, jugador que inspiró la película ‘Un sueño posible’, demanda a sus «padres adoptivos»

El exjugador de la NFL Michael Oher, cuya historia fue retratada en la película ganadora del Oscar Un sueño posible («The Blind Side»), presentó una demanda contra la familia Tuohy, quien lo acogió, a quienes le exige una compensación por el uso de su historia y su nombre. Alega que los Tuohy se beneficiaron económicamente al presentarse falsamente como sus padres adoptivos.

Oher, ahora de 37 años y retirdado del fútbol americano profesional, afirma que los Tuohy le dijeron que iban a adoptarlo, pero en lugar de eso presentaron una tutela que lo privó de millones de dólares.

Oher pide a la corte una orden para que los Tuohy «demuestren los motivos para el incumplimiento de sus obligaciones de proporcionar cuentas regulares o de actuar en el mejor interés de su protegido, Michael J. Oher».

Se menciona que la familia Tuohy recibió 225,000 dólares y el 2,5% de los ingresos brutos en la taquilla por vender los derechos de adaptación del libro a Hollywood, mientras que Oher no recibió ningún pago.

Un sueño posible fue estrenada en 2009, no solo se convirtió en un éxito de taquilla, sino que también catapultó a Sandra Bullock a ganar un Oscar por su interpretación de Leigh Anne Tuohy. Basada en hechos reales, el film narra la inspiradora historia de Michael Oher, un joven afroamericano que, al borde de la indigencia, es acogido por la familia Tuohy y, gracias a su impresionante físico, se convierte en una estrella de la NFL.

Oher dijo: «Tengo el corazón roto por la revelación compartida en la demanda de hoy. Esta es una situación difícil para mi familia y para mí. Quiero pedir a todos que por favor respeten nuestra privacidad en este momento. Por ahora, dejaré que la demanda hable por sí misma y no ofreceré más comentarios».

Mientras Sean Tuohy ha respondido a estas acusaciones afirmando que la tutela de Oher fue un requisito de la NCAA para facilitar su fichaje con la Universidad de Mississippi. A pesar de la tormenta legal, Sean expresó su profundo dolor por la situación, declarando a The Daily Memphian: “Es muy triste pensar que nuestro objetivo era hacer dinero con cualquiera de nuestros hijos, pero vamos a querer a Michael con 37 años igual que lo quisimos cuando tuvo 16 años”.